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jueves, 22 de abril de 2010

VI. Una teáloga de la espiritualidad de la Diosa: Caitlin Matthews. La Conservadora y la Potenciadora

Con este post termina la serie dedicada a resumir el desarrollo que hace Caitlin Matthews de su categorización de los aspectos de la Diosa.


LA CONSERVADORA (La que nutre la vida)

La Conservadora aparece para mantener la vida y nutrirla. Los primeros relatos sobre ella ponen de manifiesto su preocupación por los alimentos físicos. La diosa japonesa Ukimochi, nombre que significa "diosa que produce alimentos", proporciona comida a partir de su cuerpo:
"De su cabeza, el buey y el caballo; de su frente, el mijo; de sus cejas, los gusanos de seda; en sus ojos, las verduras; en su vientre, el arroz; en sus genitales, el trigo y las judías..."
Isis también dice de sí misma: "Fui la primera que revelé a los mortales los misterios del trigo y de la avena."
Los indios pueblo, incapaces de alimentarse de las hierbas que crecían en sus territorios, prepararon una ofrenda al sol, quien envió a sus hijas, las Doncellas del Maíz.Las hermanas bailaron entre la hierba, convirtiéndola en plantas de maíz. Pero el pueblo perdió el respeto al maíz, sabiendo que el baile de las doncellas producía cosechas abundantes, por lo que ellas huyeron y se escondieron en la tierra de las katchinas, con lo que el pueblo volvió a pasar hambre. Lamentando sus obras, rogaron a las doncellas que regresaran, y éstas así lo hicieron, y el pueblo aprendió a cultivar los campos, y a considerar sagrada a la mazorca.
En todo el mundo agrícola, los muchos rituales de siembra y de cosecha reflejan el carácter de la Conservadora, quien rebosa abundancia en función de nuestro uso prudente de la naturaleza y de nuestro respeto a la misma, pues no es posible forzar a la Diosa más allá de sus límites.
Pero no sólo de pan vive la creación. El placer y la alegría, así como las muchas artes de la vida son también misión de la Conservadora. Cuando Hator riñó con Ra, su padre, éste encargó a Thot que la convenciese de que regresara: "Sin ti, los templos están vacíos y en silencio. Sin ti no hay música ni bailes, ni risa ni embriaguez. Sin ti, se deseperan los viejos y los jóvenes. Pero, si regresas conmigo, sonarán de nuevo las arpas y los panderos, los laudes y los platillos. Egipto bailará. Egipto cantará. Las dos tierras se alegrarán como nunca."
El mito repite el esquema de Demeter negándose a hacer fructificar la tierra cuando es raptada su hija, y el reverdecer de la misma cuando le es devuelta.
Hator, por otra parte, continúa desempeñando la función conservadora en el Mundo Subterráneo, donde se aparece al alma del difunto con el pan y el agua de la bienvenida.
La Brighid céltica es patrona de los poetas, los herreros y los curadores. Es conservadora de la tradición, y guardiana de la memoria ancestral.
La diosa griega Hestia, símbolo del fuego del hogar, es también una imagen de la Conservadora.
Los actos de este aspecto de la Diosa son los de la vida cotidiana, que tendemos a no tomar en cuenta por su misma familiaridad:
"Debemos llevar a cabo los actos más sencillos dándonos plena cuenta de su significado, dándoles una oportunidad de comunicar en nuestras vidas su sentido elemental: verter agua de una jarra, amasar el pan, romper un huevo, observar los movimientos inconscientes de los que amamos, trabajar la tierra, cortar verduras cantar una canción... A través de ellos, la Diosa, nuestra madre, se comunica con nosotros a través de su cuerpo, dentro de su propia creación misteriosa... Estamos marcados físicamente con los símbolos de tierra de la Generadora Divina."
En esos actos diarios alcanzamos la comunión con la Conservadora, convirtiéndonos en conservadores nosotros mismos. Ella nos da una base de realidad, y nos hace capaces de sentarnos junto al fuego a compartir el alimento como parte de la familia humana. Ella convierte cada acto en la tierra en un sacramento que encierra en sí mismo a toda la creación.


LA POTENCIADORA (La que otorga la sabiduría)

La Potenciadora otorga conocimiento y madurez verdadera, haciendo que seamos eficaces en la forma en que vivimos nuestra vida. En todos los países y ciclos temporales existe una Diosa que recibe el honor supremo. Ya sea Isis, Kuan Yin o María, goza de la estima universal por ser capaz de provocar grandes cambios.
La potenciación es un proceso de entrega de la energía que nos ayuda a ejecutar actos eficaces en nuestra vida. Y, cuando nos hemos potenciado personalmente somos también capaces de potenciar a otros. La potenciación no se puede, además, recibir a nivel intelectual. Se absorbe por todos los niveles del ser, y los afecta a todos. Acudir a la Potenciadora en busca de ayuda es acudir a la raíz de la sabiduría.
Así se dirigen los fieles a la Tara tibetana:

"Estás adornada con las mejores vestiduras
y con muchas piedras preciosas.
Tu mano derecha que reparte dones
otorga logros mágicos al que te invoca;
tu mano izquierda sostiene una flor de loto,
símbolo de tu pureza sin mancha.
Tus dos manos
son la unión de los Medios y la Sabiduría.
Cuerpo de unión sin límites,
yo te rindo homenaje."

La Potenciadora también se concibe como un canal o puente de sabiduría, como en el caso de María, potenciadora también de lo divino masculino:

"Qué alegrías manan para el mundo
del pozo de tu vientre, profundo y blanco,
del que surge una era recién creada
y la luz dorada, y la Luz Dorada."

Otra Potenciadora mítica es María Magdalena, que en las escrituras gnósticas revela su poder de transmitir sabiduría: "Hermana, sabemos que el Salvador te amaba más que al resto de las mujeres. Cuéntanos las palabras del Salvador que recuerdes, lo que sabes y nosotros no hemos oído" Y ella responde: "Os revelaré lo que os está oculto".

También Sofía es potenciadora, y su bajada del Pleroma a la creación delata su amor por la misma. Si se va a negar a la humanidad la plenitud de la beatitud, entonces su papel es quedarse exiliada en medio de esa creación hasta que la última hoja de hierba haya retornado al Pleroma. La presencia constante de Sofía y la Shekina entre nosotros, incluso en el seno de las tradiciones más ortodoxas, abre la esperanza de que se pueda comprender a la Diosa como Potenciadora en nuestro tiempo.
La Mujer del Bisonte Blanco, Potenciadora del pueblo lakota, otorga a la tribu la pipa sagrada como símbolo de su relación esencial con la Creación:
"Con esta pipa sagrada... andarás como una oración viva. Con tus pies apoyados en la tierra y con el tubo de la pipa extendido hacia el cielo, tu cuerpo forma un puente vivo entre lo sagrado de abajo y lo sagrado de arriba. Wakan Tanka sonríe al vernos, pues ahora somos como uno: La tierra, el cielo, todas las cosas vivientes, los seres de dos pies, los de cuatro pies, los alados, los árboles, las hierbas. Junto con el pueblo, todos están emparentados, son una familia. La pipa los mantiene unidos."
Esta capacidad de potenciación la comparte el gran símbolo europeo, el Grial, vehículo potenciador que hace fértil la tierra estéril, que devuelve la alegría y la plenitud al espíritu agotado. La Doncella portadora del Grial y su compañera, la Dama Fea mensajera del Grial, que muestra el camino a los caballeros que lo buscan, producen entre las dos la restauración de la Creación, y muestran juntas el doble rostro de la Potenciadora, que atrae tanto como advierte y amonesta.
"La Potenciadora desciende hasta lo más profundo de nuestras necesidades, aliviándolas directamente. Otorga sus presentes con gran sencillez: Comida para los hambrientos, soberanía a cambio de un beso, curación por la aplicación de lo semejante a lo semejante.
Los tesoros con los que nos potencia siempre han sido nuestros, pero los hemos rechazado por considerarlos demasiado familiares. No hemos aprovechado nuestros mejores recursos, pero ella los ha conservado a resguardo para nosotros, más allá de la esperanza y del miedo.
Por medio de sus dones, tenemos por fin la potencia necesaria para usar nuestros propios poderes latentes cuando salgamos del Templo y entremos en el mundo. Ya no tenemos que visitar el templo para ser potenciados: Somos el templo, y nuestros corazones son su santuario."